38q - "Tenemos Una Biblia y No necesitamos Más Biblia" - Libro de Mormón - Las Profecias se Cumplen en nuestros Dias.

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El tema de hoy

559-545 a.C. 2 Nefi: 29: 6 ¡Oh necio, que dirás: Una Biblia; tenemos una Biblia y no necesitamos más Biblia! ¿Tendríais una Biblia, de no haber sido por los judíos?

7 ¿No sabéis que hay más de una nación? ¿No sabéis que yo, el Señor vuestro Dios, he creado a todos los hombres, y que me acuerdo de los que viven en las islas del mar; y que gobierno arriba en los cielos y abajo en la tierra; y manifiesto mi palabra a los hijos de los hombres, sí, sobre todas las naciones de la tierra?

8 ¿Por qué murmuráis por tener que recibir más de mi palabra? ¿No sabéis que el testimonio de dos naciones os es un testigo de que yo soy dios, que me acuerdo tanto de una nación como de otra? Por tanto, hablo las mismas palabras, así a una como a otra nación. Y cuando las dos naciones se junten, el testimonio de las dos se juntará también. (Énfasis agregado).

Pintura: Greg K. Olsen

Como el titulo de este blog post, "Tenemos una Biblia y No Necesitamos más Biblia", se refiere a una profecía hecha por un Profeta del Libro de Mormón que está relacionado con una parcialidad religiosa comúnmente sostenida por muchos en nuestros días en la historia del mundo. ¿Cómo conocía esta verdad Nefi? Él la conocía porque poseía el espíritu de profecía y revelación, que le permitía hablar las palabras de Jesucristo, que a él le habían sido reveladas. Jesús conoce todo lo que hay que conocer acerca de los pensamientos y las acciones, pasadas, presentes y futuras, de toda la humanidad.

El tema de hoy es sólo una parte de la Escritura, que desearía que ustedes leyeran. El capítulo 29 de II Nefi, fue revelado por el Jesucristo premortal a su Profeta Nefi, hijo de Lehi, a través del poder de Su don de Revelación y Profecía. Esto ocurrió en algún tiempo, durante los años 559 a 545 a.C.

2 Nefi 29:1-14

Me gustaría que ustedes se centren en el versículo 13 del capítulo 29, que a continuación cito:

29: 13Y acontecerá que los judíos tendrán las palabras de los nefitas, y los nefitas tendrán las palabras de los judíos; y los nefitas y los judíos tendrán las palabras de las tribus perdidas de Israel; y éstas poseerán las palabras de los nefitas y los judíos. (Énfasis agregado).

Aprendemos de las palabras del Señor en el versículo 13, que la Sagrada Biblia, o como Él lo expresa, las "palabras de los judíos", es sólo uno de los libros que contiene Su sagrada palabra. Ahora disponemos del Libro de Mormón y de la Biblia, que contiene Su palabra.

Aún no tenemos las palabras contenidas en los libros que las tribus perdidas de Israel han escrito.

Ahora desearía que ustedes leyeran y escucharan el capítulo que sigue, al que ustedes ya han leído.

2 Nefi 30: 1-18

Les agradezco por leer y escuchar el capítulo 30. Me gustaría enfatizar los seis primeros versículos de ese capítulo, sugiriéndoles que los lean nuevamente aquí. Luego en letra cursiva resaltada, les aclararé las palabras de Nefi, en cuanto a cómo ellas se aplican en nuestros días y en nuestro tiempo.

2 Nefi 30: 1 Y ahora bien, he aquí, amados hermanos míos, quisiera hablaros; porque yo, Nefi, no quisiera permitiros suponer que sois más justos de lo que serán los gentiles. Pues he aquí, a no ser que guardéis los mandamientos de Dios, todos pereceréis igualmente; y a causa de las palabras que se han dicho, no debéis suponer que los gentiles serán totalmente destruidos.

2 Porque he aquí, os digo que cuantos de los gentiles se arrepienten son el pueblo del convenio del Señor; y cuantos judíos no se arrepientan serán talados; porque el Señor no hace convenio con nadie sino con aquellos que se arrepienten y creen en su Hijo, que es el Santo de Israel.

3 Y ahora quisiera profetizaros algo más acerca de los judíos y los gentiles. Porque después que aparezca el libro de que he hablado, y se haya escrito para los gentiles y sellado nuevamente para los fines del Señor, habrá muchos que creerán las palabras que estén escritas; y ellos las llevarán al resto de nuestra posteridad.

4 Y entonces el resto de nuestra posteridad sabrá acerca de nosotros: cómo fue que salimos de Jerusalén, y que ellos son descendientes de los judíos;

5 y el evangelio de Jesucristo será declarado entre ellos; por lo que les será restaurado el conocimiento de sus padres, como también el conocimiento de Jesucristo que hubo entre sus padres.

6 Y entonces se regocijarán; porque sabrán que es una bendición para ellos de la mano de Dios; y las escamas de tinieblas empezarán a caer de sus ojos; y antes que pasen muchas generaciones entre ellos, se convertirán en una gente pura y deleitable.

El Señor Jesucristo resucitado, también profetizo acerca del restablecimiento de Su Iglesia en los Últimos Días entre los gentiles (no israelitas), que habrían conducido a sus descendientes (los nativos americanos) desde sus tierras establecidas. Él les dijo a ellos que el registro de su pueblo, desde el tiempo en que dejaron Jerusalén hasta que cesaron de ser profetas entre ellos, para continuar registrando su historia, sería un importante medio para restaurar Su Evangelio en los Últimos Días. Esto, por supuesto, iba a convertirse en: El Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo.

Ahora haré referencia a los escritos de un gran erudito Mormón, el Dr. Hugh W. Nibley, que estuvo en la Facultad de Brigham Young, en Provo, Utah, durante muchos años. Falleció el 24 de febrero, 2005.

Hugh W. Nibley, Phd

En el libro, "El Mundo y los Profetas" ("The World and the Prophets"), del Dr. Hugh W. Nibley, experto en la historia del Cristianismo primitivo, (tomado de una serie de conferencias radiales que él pronunció en la Radio KSL (ciudad de Salt Lake, Utah), en 1954), muy hábilmente (el estudio los documentos originales en sus lenguas originales: griego, latín y otros) destaca aquellas mismas cosas acerca de las cuales el Señor Jesucristo resucitado les advirtió a los nefitas en

El Libro de Mormón, 3 Nefi 29:6 Sí, ¡ay de aquel que niegue las revelaciones del Señor, y del que diga que el Señor ya no obra por revelación, ni por profecía, ni por dones, ni por lenguas, ni por sanidades, ni por el poder del Espíritu Santo! (Letra cursiva resaltada, agregada para énfasis).

En realidad, también se aplica directamente a la Iglesia Cristiana antigua, así como a aquellas iglesias que más tarde derivaron de ellas, y constituyen las iglesias Cristianas de nuestros días. Las iglesias Cristianas en la actualidad no creen en las revelaciones del presente, ni en las profecías, ni en el uso del don de lenguas, ni en las sanidades, ni en las bendiciones por el don del Espíritu Santo, aplicadas a sus vidas personales.

Del libro arriba mencionado el Profesor Nibley, destacó lo siguiente: (párrafos extraídos del capítulo 8, paginas 63-64), "El reciente descubrimiento de una biblioteca Gnóstica completa en Egipto, no solamente ha revivido, sino acelerado el estudio del episodio, más desconcertante y portentoso en la historia de la iglesia: el surgimiento de los Gnósticos. El estudio de campo más reciente, es un trabajo, impresionante y completo, realizado por un número de eruditos holandeses, que corrobora que la crisis Gnóstica significa el fin de la iglesia primitiva y el momento, en el cual la cristiandad entre en una nueva fase de su historia'. (ref. citada). En esta gran revolución del siglo segundo, la orientación total de la iglesia cambió completamente.

¿Qué fue lo que produjo esto? Fue el cese de las voces proféticas. La continua demanda a la iglesia de dones espirituales, especialmente, el don de profecías, dio surgimiento a un ejército de charlatanes y faquires, quienes, a pesar de estar desacreditados en su tiempo, dejaron su marca, conspicua y permanente, en la iglesia Cristiana. Estos fueron los así llamados Gnósticos".

"Pablo había profetizado que “donde hay profecías, ellas se acabaran; donde hay lenguas, ellas cesaran; donde hay conocimiento, el desaparecerá”. (I Corintios 13:8)"

"Aquí, el así denominado texto original, utiliza la misma palabra para referirse al cese de las profecías, y a la desaparición del conocimiento, Katargethesontai, 'para ser retirada de circulación', 'para que no sea operativa', usada ambas veces en el futuro indicativo. Aquí no hay un sentido de contingencia; el enunciado total es simple y enfático: 'Tales profecías, como las que hay, se terminaran; tales lenguas como las que existen cesaran (pausontai); tal gnosis, como la que existe, se acabara'.

Estos dones no iban simplemente a desaparecer; ellos iban a ser retirados. Ya eran lo suficientemente débiles, ahora tenemos estos dones sólo en forma limitada. Pablo explica en los siguientes versículos luego, remarca significativamente: 'Pero, para el tiempo presente, quedan la fe, la esperanza, y el amor, esto tres'. El descolorido 'y ahora', del Rey Santiago, no es justo para referirse al enfático día de Nuni, 'pero, en este momento', del 'original', y mientras la 'permanencia' de nuestra Biblia, en idioma inglés, enfatiza la cualidad de la firmeza perdurable y fiable, la palabra original, menei, no significa en absoluto, 'ser firme', sino simplemente, 'quedarse atrás'.

El enfático 'estos tres', que quedan, es en obvio contraste a los tres que van a ser retirados, a saber, el don de profecía, el don de lenguas, y la gnosis - el don más grande de todos".

"Gnosis, significa el acto de conocer, y, en algunos contextos, se puede traducir simplemente, como "conocimiento". ¡Pero no cuando Pablo utiliza esta palabra! Su uso frecuente del término referido, no nos deja lugar a dudas, en cuanto a lo que este transmitía a los primeros cristianos. Para ellos, este era, exactamente, lo que nosotros traduciríamos como "un testimonio del Evangelio".

'Pero yo creo, que cualquier precio vale la pena ser pagado, por el supremo valor de la gnosis acerca de Jesucristo, Nuestro Señor', Pablo escribe a los Filipenses: (3:8) 8 Y ciertamente, aún considero todas las cosas pérdida por la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús, mi Señor, por amor de quien lo he perdido todo, y lo tengo por basura, para ganar a Cristo, "¡Cuán a menudo nosotros hemos oído expresiones tales como, 'No cambiaria mi testimonio del Evangelio de Jesucristo, ni por toda la riqueza del mundo!'..." (Énfasis agregado).

He encontrado el libro del Dr. Nibley, en una biblioteca del Condado de Salt Lake (Utah, EUA). Pero si ustedes desean escuchar la grabación de la serie completa, de sus muy intensas e interesantes exposiciones, pueden ordenar una copia del CD. El costo del mismo es de $29.95 (dólares Americanos).
Luego de haberles solicitado a ustedes, leer y escuchar las palabras del gran Profeta, Nefi, podrán apreciar que mediante las profecías de Nefi, el Señor nos está diciendo a cada uno de nosotros en Su Libro de Mormón, que no debemos decir que la Biblia, es la única fuente en las que están registradas las palabras de Dios.

Se nos dice muy claramente que existe un gran propósito, para que el Señor haya hecho que el Profeta del tiempo moderno, José Smith, haya traducido el Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, con el propósito definido de mostrar, que el Libro de Mormón hará muy comprensible, que la verdadera Iglesia de Jesucristo, debe creer en y hacer uso del gran don cristiano de Profecía, del don de Lenguas, y de la Gnosis, (testimonio de una forma de conocimiento).

No hago cargo a ninguno de ustedes, estimados lectores, de que puedan haber equivocadamente considerado, ciertamente, que cualquiera de las iglesias Cristianas de nuestros días, son verdaderamente representativas de lo que, originalmente, fue la iglesia de Cristo, bajo su propia dirección, y la guía de Sus Santos Apóstoles con posterioridad. Sin embargo, con la ayuda del versículo que he citado anteriormente, correspondiente a la Carta del Apóstol Pablo a los Corintios, (ver capítulo 13:8), así como las referencias a los Profetas mencionados en el Libro de Mormón, tales como Nefi, y muchos otros, y especialmente a Nuestro Señor Jesucristo, quien personalmente se apareció a los Nefitas e hizo uso de esos dones (Profecía, Revelación, y Conocimiento Espiritual), la verdad cierta emerge claramente: que la Iglesia Católica y todas las iglesias, que han aparecido desde la Gran Restauración, no son representativas de la Iglesia de Jesucristo, tal cual se estableció originalmente.

Los puntos de vistas muy perspicaces, que expresa el Dr. Hugh W. Nibley, pueden ayudarle a ustedes, a encontrar regocijo en Nuestro Salvador, que ha escogido restablecer Su Iglesia, en nuestros días y en nuestro tiempo: La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Esto permite que, los dones de Profecía, Revelación y Conocimiento Espiritual, una vez más, estén disponibles, aun para el menor de los miembros de la única y autorizada Iglesia de Cristo.

He insertado abajo un dibujo, que ilustra una experiencia vivida por el Dr. Nibley. Él se desempeñaba como oficial no comisionado en el servicio de Inteligencia del Ejército de EUA, y participó en el Día D, en Normandía, Francia, el 6 de junio, 1944. Si ustedes observan el dibujo detalladamente, verán que sujeta un libro en su mano derecha. Ese libro era el Libro de Mormón. Ciertamente, lo llevaba consigo, en el bolsillo de su chaqueta, o en la mochila, (y lo estudiaba regularmente), durante su prolongado tiempo de dedicado servicio en Europa en ocasión de la II Guerra Mundial.

un dibujo levemente modificado: Chris Maggio

H. W Nibley, en la playa de Normandía, en el Día D de la II Guerra Mundial.

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Finalizo este Post, recordándoles a ustedes acerca del Restablecimiento de la Iglesia de Jesucristo, en 1830. También he adjuntado las siguientes pinturas, que ilustran acontecimientos claves ocurridos durante el surgimiento de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Por el Don del Espíritu de Profecía y Revelación, yo, un miembro común de esta Iglesia, les digo a ustedes que sé, que la Iglesia de Jesucristo, que Él personalmente estableció, y que fue dirigida por Él, a través de Sus Apóstoles, luego que Él ascendió a los cielos, como un Ser Resucitado, ha sido restablecida en nuestros días. Sé que el Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, nos fue dado, junto con la Sagrada Biblia, para guiarnos en la dirección que el Señor quiere que vivamos.

Les invito, cuando sientan que el Espíritu influye en ustedes, a que se contacten con los Misioneros de tiempo completo, de esta Iglesia, para que les ensenen, y consideren, siguiendo los mandamientos del Señor, ser bautizados por aquellos que tienen la autoridad de Cristo. Si ustedes desean contar con mi ayuda, a fin de localizar la Oficina de Misión más próxima a esta Iglesia, por favor, usen mi dirección de e-mail, que aparece abajo, para solicitar mi colaboración. Si mencionan en el e-mail, su ciudad, estado y nación, les haré saber por correo electrónico, la dirección y el número de teléfono correspondiente al dato solicitado. Los Misioneros se sentirán muy felices de poder asistirlos en sus inquietudes.

Él Señor aligera nuestras cargas

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Aprecio profundamente su lectura y espero deseoso que usted pueda encontrar beneficioso esto que se le presenta en este blog. Si tiene alguna pregunta acerca de lo que usted ha leído o visto en esta entrada o en cualquiera de las entradas anteriores mías, o si también tiene una curiosidad por La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y / o sus enseñanzas, por favor envíeme un e - mail. Soy Neil y mi correo electrónico es: jneilmelva@gmail.com. Si se pone en contacto conmigo me pondré en contacto con usted tan pronto como sea posible.

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Neil Birch

Traducido por María y Hernán Iturgay