Neil Birch (o Neil Abedul)

Thursday, March 25, 2010

38u - Por El Evangelio Restaurado de JesuCristo, Podemos Cantar Alegremente: "Tengo Gozo En Mi Alma Hoy" -

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EL TEMA DE HOY
Pintura por Greg K. Olsen


Dan Jones Despierta Gales -por Clark Kelley Price

Nacido en el País de Gales, Dan Jones fue bautizado en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, en enero de 1843, cuando vivía en Nauvoo, en el estado de Illinois (EUA). Él sirvió en varias misiones en su Gales natal. Al presidir la misión allí, pudo ayudar a realizar los bautismos de miles de sus ex-compatriotas. Se decía, que cuando completó su período, como líder de la Misión en Gales, uno de cada 272 habitantes, de la relativamente pequeña comunidad de Gales, se habían convertido en miembros de La Iglesia de Jesucristo de los SUD.

En la pintura que pueden apreciar al comienzo de este Post, Dan está sosteniendo, en lo alto y en su mano izquierda, la 'herramienta clave de los Misioneros', de modo que todos pudieran verla. Esta es:
El Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo
Mormón Abreviando (Condensando) El Registro de Su Pueblo -por Tom Lovell
El profeta Mormón (alrededor del 401 d.C.), sabía muy bien que el Libro, que estaba resumiendo (abreviando-condensando), sería una porción clave de la obra del Señor, en los últimos días (nuestro tiempo en la tierra), en la preparación efectiva de un pueblo para la Segunda Venida del Señor, Jesucristo. Su venida comenzará el largamente prometido y esperado (por los fieles), período de Mil Años, durante el Milenio.
Pintura: Harry Anderson

Mormón sabía que el Libro de las Sagradas Escrituras, que se encontraba preparando, se convertiría en un compañero del "Registro de los Judíos", que habría sido utilizado por siglos, cuando su libro, el Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, apareciese en nuestros días, como un compañero de lo que conocemos como "La Sagrada Biblia".
Uno de los antepasados del Profeta Mormón, fue el Profeta Nefi, (alrededor del 600 a.C.), que había emigrado desde Jerusalén con su padre, Lehi, a una tierra, que ahora es conocida como América Central, y que había profetizado lo que a continuación cito:
1 Nefi 13: 40 Y el ángel me habló, diciendo: Estos últimos anales que has visto entre los gentiles, establecerán la verdad de los primeros, los cuales son los de los doce apóstoles del Cordero, y darán a conocer las cosas claras y preciosas que se les han quitado, y manifestarán a todas las familias, lenguas y pueblos que el Cordero de Dios es el Hijo del Eterno Padre, y es el Salvador del mundo; y que es necesario que todos los hombres vengan a él, o no serán salvos.
41 Y han de venir conforme a las palabras que serán establecidas por boca del Cordero; y las palabras del Cordero se darán a conocer en los anales de tu posteridad, como también en los anales de los doce apóstoles del Cordero; por lo que los dos serán reunidos en uno solo; porque hay un Dios y un Pastor sobre toda la tierra.
De este modo, el Libro de Mormón iba a establecer las verdades enseñadas en la Sagrada Biblia, que han sido tergiversadas por las muchas iglesias, que falsamente clamaban ser una continuación de la Iglesia establecida por el Señor Jesucristo y guiada por Sus Doce Apóstoles, después que hubo ascendido al cielo.

En este Blog, hemos aprendido previamente acerca del papel del Profeta de América, José Smith, hijo, en el logro de la segunda de las dos series de Escrituras que eran necesarias, conforme a las palabras del antiguo Profeta de América, Nefi, arriba citado, (Que iba)
...a establecer la verdad de la primera, (La Sagrada Biblia), las cuales son las de los Doce Apóstoles del Cordero, y darán a conocer las cosas claras y preciosas que se les han quitado, (Aclaración agregada).
La porción final de esta entrada, nos ayudará a comprender una experiencia de aprendizaje particularmente difícil, en la vida del profeta José Smith, hijo, y que el Señor Jesucristo lo ayudó a superar. En el Libro de Doctrina y Convenios, Sección 3, aprendemos acerca de algo que el Señor le enseñó a José Smith:
D. y C. 3:1 LAS obras, los designios y los propósitos de Dios no se pueden frustrar ni tampoco pueden reducirse a la nada.
2 Porque Dios no anda por vías torcidas, ni se vuelve a la derecha ni a la izquierda, ni se aparta de lo que ha dicho; por tanto, sus sendas son rectas y su vía es un giro eterno.
3 Recuerda, recuerda que no es la obra de Dios la que se frustra, sino la de los hombres;
4 porque aun cuando un hombre reciba muchas revelaciones, y tenga poder para hacer muchas obras poderosas, y sin embargo se jacta de su propia fuerza, y desprecia los consejos de Dios, y sigue los dictados de su propia voluntad y de sus deseos carnales, tendrá que caer e incurrir en la venganza de un Dios justo.
5 He aquí, se te confiaron estas cosas, pero cuán estrictos fueron tus mandamientos; y recuerda también las promesas que te fueron hechas, si no los quebrantabas.
6 Y he aquí, con cuánta frecuencia has transgredido los mandamientos y las leyes de Dios, y has seguido las persuasiones de los hombres.
7 Pues he aquí, no debiste haber temido al hombre más que a Dios. Aunque los hombres desdeñan los consejos de Dios y desprecian sus palabras,
8 sin embargo, tú debiste haber sido fiel; y con su brazo extendido, él te hubiera defendido de todos los dardos encendidos del adversario; y habría estado contigo en todo momento de dificultad.
9 He aquí, tú eres José, y se te escogió para hacer la obra del Señor, pero caerás por motivo de la transgresión, si no estás prevenido.
10 Mas recuerda que Dios es misericordioso; arrepiéntete, pues, de lo que has hecho contrario al mandamiento que te di, y todavía eres escogido, y eres llamado de nuevo a la obra.
11 A menos que hagas esto, serás desamparado, y llegarás a ser como los demás hombres, y no tendrás más don.
12 Y al entregar lo que tradujiste por la visión y el poder que Dios te había dado, entregaste lo que era sagrado en manos de un hombre inicuo,
13 que ha despreciado los consejos de Dios y quebrantado las más santas promesas hechas ante Dios, y ha confiado en su propio juicio y se ha jactado de su propia sabiduría.
14 Y ésta es la razón por la cual has perdido tus privilegios por una temporada;
15 porque has permitido que el consejo de tu director sea hollado desde el principio.
16 Sin embargo, mi obra avanzará, pues por cuanto el conocimiento de un Salvador ha venido al mundo, mediante el testimonio de los judíos, así también llegará a mi pueblo el conocimiento de un Salvador,
17 y a los nefitas, a los jacobitas, a los josefitas y a los zoramitas, mediante el testimonio de sus padres,
18 y este testimonio llegará al conocimiento de los lamanitas, los lemuelitas y los ismaelitas, que degeneraron en la incredulidad a causa de la iniquidad de sus padres, a quienes el Señor permitió que destruyeran a sus hermanos, los nefitas, a causa de sus maldades y abominaciones.
19 Y para este propósito mismo se preservan estas planchas que contienen esta historia, a fin de que se cumplan las promesas del Señor a su pueblo;
20 y para que los lamanitas lleguen al conocimiento de sus padres, y sepan de las promesas del Señor, y crean en el evangelio y tengan confianza en los méritos de Jesucristo, y sean glorificados por medio de la fe en su nombre, y se salven mediante su arrepentimiento. Amén. (énfasis agregado)
José Smith, hijo, tenía necesidad de que el Señor le enseñara, así como leímos en la Sección 3, del Libro de Doctrinas y Convenios, que más arriba citamos, porque: después de completar la traducción de las 116 páginas manuscritas, del Libro de Mormón, por el Don y el Poder de Dios, que le habían sido otorgados, José le había solicitado al Señor permiso para satisfacer la solicitud de Martin Harris, amigo y estrecho colaborador, para mostrar esas 116 páginas manuscritas a su esposa (la de Martin Harris), que evidentemente dudaba de que José Smith realmente, estaba traduciendo un libro antiguo.

Al principio el Señor había negado a José dicho pedido, pero después José renovó su petición varias veces, a fin de complacer el deseo de su amigo, Martin Harris, para lograr calmar a su esposa. El Señor le concedió lo que deseaba.

Cuando José le pidió a Martin, que le devolviera las 116 páginas manuscritas, su contestación fue que las había perdido. Esto resultó en la respuesta del Señor a José, que hemos leído más arriba. Por cierto, el Señor sabía que todo se resolvería, sin embargo, también sabía que José tenía mucho que aprender, para cumplir lo que se esperaba de él, en la realización de la traducción del Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, y en el desempeño de otras asignaciones, que el Señor le encomendaría.

En una revelación dada a José durante el verano de 1828, el Señor instruyó, por consiguiente:

Esta Escritura es una gran evidencia de cómo el Señor, mediante Revelación, guió y educó, con cuidado y amor, al Profeta José Smith, hijo, a quien había elegido para llevar a cabo Su Gran Obra (del Señor) de los Últimos Días.

Ustedes habrán aprendido de esta revelación, que el Señor estaba preparado, con Su gran conocimiento previo de todas las cosas, para cuidar de esta y de cualquier otra conveniencia.

La perfecta solución (del Señor) era hacer, que el Profeta José reemplazara la traducción, que había hecho previamente de las paginas, luego perdidas, que eran parte de las Planchas Mayores de Nefi, y que contenían la condensación hecha por Mormón acerca de la primera época de la historia temprana de la nación Nefita, por una traducción de las Planchas Menores de Nefi. Esto evitó cosas, que el Señor mencionó en esa revelación, que podrían haber causado, que aquellos que habían tomado posesión de las 116 páginas manuscritas, afirmaran que la traducción hecha por el Profeta José fuera fraudulenta.

Realmente, el resultado final iba a ser plenamente exitoso, porque como el Señor señaló en la Sección 10, el registro, que fue traducido en lugar de aquel que se había perdido, contenía más de las cosas preciosas de Su Evangelio, muchas más que en el caso del registro histórico perdido.

Antes de dejar este muy importante acontecimiento histórico, me gustaría mostrar a ustedes, lectores de este Blog, cómo nos ha sido dada evidencia experta de que José Smith, no fabricó las revelaciones, que él dijo que había recibido del Señor.

Me enteré de todo ello, a través de algo, que un editor escribió en un nuevo libro, que fue publicado en el otoño del 2009, por la prensa del Historiador de la Iglesia, titulado: "Los Papeles de José Smith, Revelaciones y Traducciones", (THE JOSEPH SMITH PAPERS, REVELATIONS AND TRANSLATIONS). Escribió en la página xxii, de la introducción de ese nuevo libro:
"Un historiador ha dicho que esta revelación, (DyC 3), ' le dio el primer indicio de cómo José hablaría con voz profética. El orador, está por encima y fuera de José, claramente separado, emocional e intelectualmente. La reprimenda de José es tan directa como la denuncia de Martin Harris. No se hace ningún esfuerzo por ocultar o racionalizar, ninguna señal de José para justificarse a si mismo ante posibles seguidores". (Bushman, Rough Stone Rolling, 69; ver también, Bushman, Believing History ("Creyendo la Historia"), 254).
El resultado final de todo esto fue que en 1830, El Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, fue publicado, y aquello que el antiguo Profeta Nefi había profetizado, realmente había ocurrido.
1 Nefi 13:40 Y el ángel me hablo, diciendo: Estos últimos anales que has visto entre los gentiles, establecen la verdad de los primeros, los cuales son los de los Doce Apóstoles del Cordero, y darán a conocer las cosas claras y preciosas que se le han quitado, y manifestarán a todas las familias, lenguas y pueblos que el Cordero de Dios es el Hijo del Eterno Padre, y es el Salvador del mundo; y que es necesario que todos los hombres vengan a Él o no serán salvos.
El Libro de Mormón fue dado a luz a través de la poderosa mano del Señor, Jesucristo, y es la "piedra angular" de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, conforme a quien se convertiría en el altamente exitoso, Profeta del Señor: José Smith.

La Biblia y el Libro de Mormón son compañeros puestos a disposición por el Señor, a través de los Líderes de Su Iglesia, para traer la salvación verdadera a la humanidad, una vez más.
Pintura:Greg K. Olsen

Con la Sagrada Biblia y el Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo, los miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, bajo la dirección de Profetas y Apóstoles, tal como era el caso, en la Iglesia Establecida por el Señor Jesucristo, antes de su ascensión al Cielo, después de Su resurrección, pueden verdadera y plenamente regocijarse en las bendiciones del Evangelio de Jesucristo en nuestros días, y continuar preparándose para su bendita Segunda Venida:
Pintura: Harry Anderson
Ahora los invito a reclinarse frente a sus computadoras, con el volumen activado, para disfrutar de un Video musical especial, que podría ser interpretado, como una celebración de las bendiciones, que ha recibido la humanidad por estar continuamente guiada por nuestro Salvador Jesucristo, y Su Evangelio, que están perfectamente enseñadas en la Sagrada Biblia y en el Libro de Mormón, Otro Testamento de Jesucristo.

En este Video, la música de Acción de Gracias por nuestro Señor y Salvador, se compuso en base al tema del Otoño del Año. Este Video, "Si Hay Gozo en Tu Corazón", ha sido producido por una Soprano miembro de la Iglesia por seudónimo,

¨Mormon Soprano¨.

Mormon Soprano tomó la mayoría de todas las fotos utilizadas. La música es interpretada por el Coro del Tabernáculo de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

Las palabras del himno son a Inglés.

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Neil Birch

Traducido por María y Hernán Iturgay